Luego de consagrarse campeón mundial de peso gallo tras vencer por nocaut técnico al sudafricano Landile Ngxeke, el boxeador tijuanense José Manuel “Chapulín” Salas ya se prepara mental y físicamente para los retos que le esperan rumbo al 2026.
El ahora campeón del mundo reconoció que la emoción de aquella noche fue tan intensa que incluso después de bajar del ring le costaba asimilar lo que había logrado. “Entré al camarino y todavía no aterrizaba, no me la creía”, compartió Salas, quien dijo sentirse muy contento por una pelea que marcó su carrera y su vida.
Con el título en sus manos, el pugilista de Tijuana dejó claro que no piensa conformarse. Su objetivo es dominar la división gallo, una de las más competitivas del boxeo internacional, donde actualmente Japón concentra a los monarcas más fuertes y físicamente imponentes que poseen los cetros más importantes.
Salas afirmó que está dispuesto a seguir entrenando y luchando para representar a México, un país que históricamente ha hecho del boxeo uno de sus deportes más representativos y exitosos a nivel mundial.
“El objetivo es mantenerme acalmado, tener disciplina y seguir trabajando fuerte junto a mis entrenadores del gimnasio de Jackie Nava. Sé que vienen nuevos retos y quiero estar listo para enfrentarlos”, declaró el campeón.
Con enfoque, disciplina y los pies en la tierra, el Chapulín Salas se perfila para consolidarse como una figura importante del peso gallo y seguir haciendo historia en el boxeo profesional, llevando el nombre de Tijuana y de México a lo más alto.