El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este lunes una orden ejecutiva que exige al Departamento de Justicia investigar y procesar a las personas que quemen la bandera estadounidense.
El mandatario señaló que la pena por hacerlo sería de un año en la cárcel.
La orden también establece que los extranjeros que cometan este acto podrían enfrentar la revocación de sus visas, permisos de residencia y hasta la deportación.